El Cumpleaños de María Pilar.
El pasado día 3 de mayo cumplió 90 años María Pilar Jiménez – la hija pequeña de D. Federico -. Sigue con su buen humor y, según ella, no ha notado diferencias apreciables por ese año más. Desde aquí aprovecho la oportunidad para desearle un feliz cumpleaños.
Las carreteras del valle del Esera.
“ El paisaje, que ya venía adquiriendo progresivamente una recia hermosura, transfórmase de súbito y alcanza una grandiosidad bárbara, al estrecharse la ruta entre erguidos peñascales de una altivez gigantesca, que se levantan en rocas casi verticales, algunas de las cuales se elevan a más de cien metros de altura” (J. García Mercadal, Del llano a las cumbres, 1923).
Muchas, y muy poéticas, descripciones se han escrito sobre la belleza del magnífico Congosto del Ventamillo, pero también, todas, coincidían en la problemática para el tráfico de personas y mercancías.
Los problemas que acarreaba - por fin - parecía que se solucionarían cuando, en 1898, el día 23 de marzo a la una de la tarde, salió a subasta la obra para construir una carretera por su interior – a 768.969,19 pesetas subía “el presupuesto de contrata”.
Corría el mes de mayo, del mismo año, cuando “marchaban al terreno del emplazamiento de las obras del paso del congosto del Ventamillo,… los ingenieros Sres. Sans, Soler y Moreno con el representante del contratista Sr. Gallifa, para dar desde luego comienzo a los trabajos y proseguirlos sin interrupción. “
Todos los medios de comunicación eran conscientes de la importancia del evento y podemos leer en uno de ellos: “Las comarcas de Campo y Benasque ven así satisfechas legítimas aspiraciones hace muchos años acariciadas y estériles hasta ahora.”.
Las obras estuvieron llenas de “habladurías insidiosas, …de que se pretendía demorar la ejecución de las obras “. M. Gallifa, el contratista de las mismas, tenía grandes dificultades en los trabajos “por la falta de braceros” “aun pagándoles un real más de jornal”. Y pedía por carta, al Alcalde de Benasque, “rogándole ayuda y colaboración moral, para aumentar cien peones, que el no pudo encontrar”.
61.482,07 metros cúbicos de roca dura a 2,30 pesetas el metro cúbico – la roca floja a 1,50 y la tierra a 0,70 – era necesario desmontar en el Congosto de Ventamillo, según el presupuesto de la obra, para poder atravesarlo.
El congosto de Argoné, y el de Ventamillo eran, y son, el verdadero problema de las comunicaciones del valle. Los relatos de los diferentes viajeros que a lo largo del tiempo han recorrido esta tierra permite hacernos una idea de los problemas que generaba.
En 1908, los empleados del Canal de Aragón y Cataluña que estudiaban el posible aumento de caudales, y se dirigían al nacimiento del Esera, debieron dejar el automóvil del Canal en Argoné y seguir el camino en caballerías.
En ese mismo año, también los Correos tenían que coger caballerías desde Campo pues “no existe carretera ni camino para que por ellos transiten carruajes, aunque sean de dos ruedas, desde Argoné“.
El Congosto, según la jefatura de carreteras, no se abrió al público hasta el 31 de enero de 1912.
El mismo viajero que nos describía las bellezas, también nos narra las diferentes instalaciones de las obras de catalana que se encontraba.
Durante las obras de la Central se instalaron “puentes colgantes tendidos por el río para facilitar el acceso de los obreros a los sitios de trabajo”. Asimismo, también en el Congosto, “La previsión de la “Catalana de Gas” alumbró este túnel, de trecho en trecho, con lámparas eléctricas”, como se observa en la postal de la nevada de enero de 1914.
Los medios de transporte de tracción “animal”.
CGE contrataba a cualquiera que pudiera venir con sus medios de transporte, los obreros escaseaban, los medios de transporte para las piedras de las obras, también. Amontonadas, en la cercana cantera, esperaban pacientes su transporte a los muros que subían rápidamente por la multitud de obreros que afanosamente se disponían a colocarlas.
Todos los tajos aparecen cubiertos con vías, para arrastrar, mediante animales o tiradas por los propios obreros, vagonetas cargadas de materiales. La mayoría de estas vías – sistema Decauville –, tenían en común su fácil desmontaje y transporte. Una vez terminada una obra se vendían y es habitual ver anuncios en la prensa de la época. En Seira, también es habitual ver los antiguos railes de la obra hincados para vallas, soportes y demás utilidades.
Los medios de transporte de tracción mecánica.
Pilar, recordando su infancia y los relatos de su padre, me contaba; “Hasta la construcción del Chalet [ de Don Federico ], residió en Barbastro primero y luego en Graus, donde Catalana tenía unas oficinas”.
Para los desplazamientos de la jefatura y movimientos de piezas y materiales se adquirieron varios vehículos. En algunas fotografías de la obra podemos ver algunos de ellos y como les llamaba la atención a los niños de la época que posaban orgullosos a su lado.
Un periódico, en la sección de anuncios, muestra un anuncio de un distribuidor de vehículos que, haciendo gala de sus ventas, cita: “ Han sido entregados por el Automóvil Salón, durante los últimos días, los siguientes automóviles: Un 22-36 HP. Berliet a Catalana de Gas y Electricidad, Un 26-38 HP. Minerva ( sin válvulas ) a Catalana de Gas”. En el mismo anuncio podemos leer que Francisco Bastos – exconcesionario del Salto del Run - compraba para él un Minerva de 18-26 HP.
Bastos y Cía, empresa que todavía existe en la actualidad, se constituyó el 22 de enero de 1913 como “Sociedad Güell, Bastos y Bertran hermanos” con un capital de 250.000 pesetas. Dicha sociedad es, posiblemente, la más breve del Registro Mercantil de Barcelona, pues duró 24 días.
Según nos cuenta una breve historia de la firma en su 150 aniversario; “…el Señor Barón de Güell no ha pensado jamás en practicar ni ha practicado acto alguno de gerente”. Imagino que erróneamente los otros tres socios lo pondrían en los títulos – por aquello de que invirtió en la sociedad el doble de dinero que ellos -, pero al Barón no le pareció bien.
Bastos, Bertran Hnos. y Cía, como pasó a denominarse después del cambio de nombre, se dedicaba a la venta de maquinaria industrial, especialmente la relacionada con el mundo textil. Francisco Bastos Ansart era uno de los socios de dicha empresa, entre otras de sus muchas actividades. Dicha firma de Barcelona sorprendió a la población local con los materiales que suministraba, según nos cuenta otro periódico local:
“Estos últimos días ha llamado la atención del público un magnífico tren, compuesto de un tractor á vapor y cinco vagones, que la S.A. CGE ha adquirido, para su servicio hidro-eléctrico, de la Casa BASTOS, BERTRAN Hnos. y Cª, sucesores de John M. Sumner & Cº, de esta. Como á primera prueba se hizo la ascensión del tren cargado al Tibidabo, con resultado completamente satisfactorio, á pesar del estado fangoso del camino por las últimas lluvias”
Notas necrológicas:
Comenzábamos el artículo con una noticia agradable y lo terminamos con una triste; la pérdida de “dos Eduardos”. En Gerona, en casa de su hijo Javier, falleció el pasado día 12 de marzo Eduardo Aguilar, jefe de la Zona de Seira durante más de 25 años, gran persona, altruista y muy dedicado a su trabajo. El día 20 de abril falleció Eduardo Roda, compañero de trabajo, otra gran persona también, y mente inquieta e imaginativa en todos los trabajos.
Continuará.
José Antonio Cubero Guardiola
Este artículo se publicó en el número 5 de la revista " Els tres llugaróns ", Abi, Seira y Barbaruens, editada por las asociaciones culturales de dichos pueblos en el verano de 2010.
Leyendo el blog, y sin ánimo de dar coba, me parece admirable el esfuerzo que esta usted haciendo por sacar a la luz algo tan disperso y poco documentado como es esta obra en particular. Se nota que disfruta con ello, es evidente, pero el trabajo que hay detrás de estos textos no es menos impresionante por ello. Es más o menos fácil ¿? buscar datos en archivos, hemerotecas, etc, pero usted ha sabido darle el toque cálido y entrañable de las personas que han vivido lo que usted esta contando. Felicidades por los artículos, siga con ellos y acabe editando un libro con este material, sus correspondientes fotos y sus postales. El tema lo merece.
ResponderEliminarEn primer lugar agradecer, sin ánimo de dar coba, sus comentarios. Toda opinión de cualquier trabajo es interesante y permite intentar mejorar y seguir por el camino adecuado.
ResponderEliminarLa historia de la construcción de la Central, lamentablemente, no es fácil de reconstruir por la falta de documentación, de archivos, y las pocas informaciones que se publicaron de la misma. Gracias a periódicos, revistas y propagandas de las empresas que construyeron los aparatos se puede hacer una leve idea de la magnitud de la misma. Pero eso lo he orientado como un acicate y no como un problema. [ no se puede hacer otra cosa ]
Siempre he creído que las cosas hay que hacerlas por que te apetecen, por el propio placer intrínseco y cualquier esfuerzo lo compensa las satisfacciones del resultado.
A veces cuando buscas una revista, la compras, y miras el número que buscabas y es el único que falta...te entran ganas de cabrearte, pero piensas en la belleza del resto y se te quitan...y como eso, solamente pasa las primeras dos mil veces...